Dios nos ama tanto que hasta ha querido amarnos con un corazón humano traspasado.
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miércoles, 4 de junio de 2014
¿Cómo responde un creyente al mal que le hacen?
...encontramos por un lado: «Me utilizaste», «Me odiaste», «Me robaste», «Te aprovechaste de mí», «Me mentiste», «Me abandonaste», «Me criticaste», «Me despediste», «Murmuraste de mí a mis espaldas», «Te metiste conmigo», «Arruinaste mi reputación», «Me aterrorizaste», «Nunca me escuchaste», «Abusaste de mí», «Mataste a mi hija», «Me lo quitaste todo»... Y luego está el otro lado, la solución: «Te perdono», «Amaré a mis enemigos», «Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen», «Rezaré por quienes me maltratan», «Haré el bien a quienes me odian», «Pondré la otra mejilla», «Te perdono», «Mostraré mi misericordia y compasión», «Elijo perdonar», «Perdón», «Setenta veces siete», «Perdonaré porque he sido perdonado», «Nunca sanaré hasta que perdone», «No me vencerá el mal», «Venceré al mal con bien»... ¿Y qué dice la Palabra de Dios? «Y vosotros, cuando os dispongáis para orar, si tenéis algo contra alguien, perdonadle, y el Padre que está en los cielos también os perdonará a vosotros vuestros pecados» (Mc 11, 25).
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